Mujeres que me inspiran
"Los hombres pueden ser tontos, gordos, divertidos, inteligentes, duros, sensuales o filosóficos. Pero las mujeres siempre tienen que ser femeninas. Femenina, femenina y femenina", declaró la artista. "Me gustaría ver a las mujeres con sus características propias, siendo ellas mismas de la misma forma que tú eres española y yo soy islandesa".
Continuamos con otra gran pintora realista. Aleah Chapin es una artista de Brooklyn que ha desarrollado su obra retratando a las personas de su alrededor. En cada lienzo capta la esencia de la persona retratándola tal y como es en ese momento. Especialmente sus cuadros se centran en las figuras femeninas, las mujeres de su entorno y las vivencias que ellas llevan intrínsecas en su piel.
A lo largo de su carrera como pintora Aleah Chapin ha expuesto en varios países como Estados Unidos, Reino Unido, Países Bajos o Alemania. Actualmente ya tiene previstas otras exposiciones en Nueva York, Londres o Los ángeles.
En una sociedad donde se «retoca» hasta la piel de una adolescente para eliminar «imperfeciones», Aleah Chapin rompe con lo establecido y con la estética de muñeca de porcelana para volver al realismo más estricto. Ella retrata la fugaz belleza de cada una de las mujeres que pinta.
on la popularidad de las redes sociales, en particular de Instagram y/o Snapchat, el desnudo o semidesnudo se ha convertido en algo omnipresente; y a pesar de la censura que a menudo amenazan estas imágenes.
Sin embargo, hay una sensación de monotonía en los tipos de cuerpos que se presentan en todo, desde los medios sociales hasta los anuncios en vallas publicitarias. Todo muy normativo, joven y atlético.
Mujeres vestidas únicamente con la confianza de sentirse a gusto consigo mismas, sin nada de ropa. Sólo con sus arrugas, manchas de la piel, pecas, bello, cabellos canos y algún que otro tatuaje.
La joven artista estadounidense comenzó su andadura artística en 2009, al terminar sus primeros estudios de arte. Ha seguido formándose desde entonces, siempre en la misma línea hiperrealista, retratando las sensaciones de la gente que tiene una historia y un pasado impreso en cada poro de su piel.
Mujeres que juegan y se expresan, que son libres y tienen una historia. De cada una de las obras de Aleah Chapin se puede aprender una valiosa lección de vida a través de un rostro, a través de un cuerpo al natural. Transmitiendo algo más allá de la pintura y más allá de la belleza efímera, un arte que traspasa edades y convencionalismos.
Aleah Chapin consigue a través de su pincel captar la belleza de unas mujeres que seguirán siendo así de bellas por muchos años que sumen a sus espaldas.
"El objetivo de mi exposición actual es mostrar que al final todos somos iguales, sin importar si somos un hombre de 84 años o una persona trans de 30 años". "Todos tenemos luchas y experiencias de estar en un cuerpo, y si pudiéramos centrarnos en lo que tenemos en común en lugar de tener miedo y juzgar nuestras diferencias, creo que el mundo sería un lugar mucho más amable".
En el 2012 ganó el primer premio de la XXXIII edición del BP Portrait Award londinense por la obra a gran escala titulada «Auntie» en la que representa el desnudo de una amiga de la familia. Este cuadro forma parte de la serie “Aunties Project” que consta de una serie de desnudos de mujeres a las que la artista ha ido conociendo durante su vida.
“Aunties Project” no es exactamente una protesta contra la belleza ideal, pero sí una reivindicación de la hermosura a cualquier edad, en cualquier talla y en cualquier forma. “Quería explorar mi historia y de dónde vengo y estas mujeres son amigas de mi madre. Yo crecí con ellas”, explica la artista americana.
"Creo que mi trabajo ha despertado controversia porque está mostrando cosas que van en contra de lo que estamos acostumbrados a ver, mostrando la realidad de que somos imperfectos y, en mi opinión, hermosamente humanos", dijo Chapin.
La siguiente mujer de la que estoy encantadísima de hablar es de una desconocida ganadora del Óscar. Rayka Zehtabchi es una cineasta iraní-estadounidense, premiada por su corto documental ganador del Premio de La Academia 2018. Su película anterior con la cual debutó como directora y participó en festivales de todo el mundo, "Madaran", es un cortometraje sobre una madre iraní que debe decidir si perdona la vida o no al asesino de su hijo.
El cortometraje "Period. End of Sentence", es el que le ha llevado hasta los mismísimos Óscars. Cuenta la historia de un grupo de mujeres de Nueva Dehli (India) que aprenden a confeccionar ellas mismas compresas sanitarias para enferntar los días de la menstruación.
"No estoy llorando porque tenga la regla", fue lo primero que dijo al recibir el premio. "No puedo creer que una película sobre mentruación acaba de ganar un Óscar".
Protagonizada por la actriz argentino-británica Anya Taylor-Joy, "Gambito de Dama" se corona como la miniserie más vista de la historia de Netflix.
Sin embargo, es complejo saber si se trata o no de un homenaje a alguien que el autor conoció o se trata de un personaje de ficción, creado gracias a la experiencia de primera mano que él mismo tenía. También producida por Netflix y encabezada por una joven y talentosísima actriz cuenta la historia de una mujer en medio de un entorno machista, desde donde debe abrirse paso. Sin embargo, en ese caso, el guión sí se basó en la historia real de Debora Feldman, que narró su vida en un libro. En cambio, Gambito de Dama es producto de una novela. Eso sí, al parecer la narración se compone de una íntima fusión entre ficción y realidad. En el libro de Tevis se mezclan datos verdaderos como los nombres de los ajedrecistas, sus encuentros y anécdotas verdaderas acerca de los torneos y campeonatos mundiales. Para confirmarlo, por supuesto, quedan sus entrevistas. En una de ellas con el New York Times, el autor admitió: "Con Beth Harmon quise rendirle un homenaje a tantas mujeres inteligentes". Su hija y su tía, que le regaló su primer tablero de ajedrez a los 7 años, habrían sido la inspiración para construirla.